EDMOND

*****

Edmond es, básicamente, la versión chunga de Un Día de Furia. Si en esta cinta Michael Douglas berreaba en un McDonalds para que le diesen la hamburguesa que salía en la fotografía, con su generosa dosis de lechuga en Edmond es William H. Macy quien reclama sus derechos como consumidor en los puticlubs más sórdidos de la ciudad después de un mal día.

Edmond es un hombre normal, con un trabajo mediocre y una integridad hasta el momento impoluta. Retraído, servil y con poco carisma un día decide alzar la voz, hasta el momento sumisa para criminar al mundo el modo de tratar a los pobres mortales.

Y es que tras esta cinta tortuosa pero sencilla con pocas ínfulas y mucho contenido se esconde una magistral obra teatral de David Mamet, el creador de Glendarry Glen Ross y otras tantas críticas al sistema americano y con el mismo bisturí y la misma mala intención, aunque con una ambientación algo pobre y una factura algo más que mejorable. A pesar de esos defectos formales la lectura que se extrae de las andanzas nocturnas de Edmond son sin duda más de un motivo para echarle un buen vistazo a esta crepuscular y deprimente (pero a conciencia) cinta que inspirará a más de uno en sus días malos.


PROS: Reconocer las odiseas de cada día y ver realizadas las fantasías de venganza del ciudadano medio.

CONTRAS: Un final algo facilón.

Publicar un comentario

Copyright © El lado oscuro del celuloide. Designed by OddThemes