Después de la tormenta

Película: Después de la tormenta.
Director: Hirozaku Koreeda.
Intérpretes: Hiroshi Abe, Kirin Jiri, Yoko Maki, Lily Franky Itsao Hashizume.
Proyección: Golem.
Afluencia: 76 personas.
Valoración: 5.


Meritoria la asistencia a esta sala y más con el partido del Madrid y el Atlético en juego. Además lo que se veía en la pantalla es una película japonesa, una filmografía poco conocida en estos momentos. Pero, sin embargo, ya es un habitual que se estrenen en España las cintas de Koreeda, el cual ya presentó este año "Nuestra hermana pequeña". Sigue con sus recetas clásicas como la familia y sus vaivenes actuales, el comer y hablar, los pequeños detalles (productos caducados, la caligrafía), la serenidad en su desarrollo y un humor peculiar, más acusado en la película vista. Presenta una historia poco novedosa como la del padre irresponsable (un novelista de un solo libro metido a detective de infidelidades y jugador habitual en casas de apuestas) pero con encanto, una esposa desconfiada, un niño cómplice secreto de su progenitor y la madre de éste, al que le salva de algún apuro y se deja robar por él para aplacar su ludopatía. Un tifón los reúne en la casa de la matriarca y se desarrollan escenas de fuerza, sin las exageraciones occidentales y sabiendo esquivar lo teatral. Lo malo de todo esto es la participación de personajes con poca incidencia en la historia, a lo sumo resaltar lo calamitoso del protagonista. Esta dispersión tarda en centrarse y tras el momento cumbre es como si no pasase nada especial. Da aire de cierta complacencia y hasta deja una estela grosera, alejada de obras superiores como "De tal padre, tal hijo" o el film anterior. Pero lo compensa con simbolismos como ese barrio prometedor y luego estancado, como la vida del padre o ese mandarino que no da frutos pero del que se alimentan las orugas. El reparto ayuda pero destacar aquí a un actor con mayúsculas y, hasta la fecha desconocido para mí, aunque popular en su país. HIROSHI ABE. Vaya talento, desde la primera imagen enamora con su aspecto alto pero desgarbado y su mirada seductora pero alicaído. Ya no se puede apartar la vista de él y, aunque no veamos grandes cosas, no deja de interesar su periplo por la pantalla. Hasta voy corriendo a consultar su biografía a Wikipedia donde nos indica que fue modelo, ha trabajado mucho en televisión y ya había trabajado con el director en "Still walking". De momento no hay proyectos en Hollywood, ni falta que hace.

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