RADIOFRECCIA

*****

Primera película de Luciano Ligabue donde decide cometer los errores de los que fue capaz para rectificarlos muy sabiamente en su segundo trabajo DaZeroADieci.


Freccia es un joven que tiene un problema difícilmente de solucionar. La vida ha conseguido guiarle de tal forma que parece que todo lo que le sucede está fuera de sus manos. Su historia llena de altibajos y de momentos grandiosos alternándose con los peores es contada el último día de emisión de una radio local inaugurada por sus amigos y que tendrá su nombre RadioFreccia como homenaje.


Una pena que a veces se les olvide la existencia de narrador y que la estructura en capítulos quede la mar de forzada y extraña con esas “oníricas” de unión entre todos ellos. Y también es una pena que vengan a la cabeza otras cintas que posiblemente reflejen mucho mejor las “Radios Libres” de los setenta como en I Cento Passi, pero en realidad es sólo el modo que ha encontrado de contar la historia, una sutil excusa.


Algo si hay que reconocer a la cinta y es la labor del imprescindible Stefano Accorsi, un autentico imprescindible de cualquier película italiana actual (Romanzo Criminale, L'Ultimo Baccio,...) . Su personaje es especialmente difícil pero al menos consigue dotarle de un carácter convincente haciéndole atractivo en sus mejores y sus peores momentos. Pero no hay forma de convertirle en lo entrañable que debería en sus transiciones de duro delincuente a enamorado obsesionado, de drogadicto a amigo sincero, de simpático patán a cabeza loca.


Su otro punto a favor es sin duda la banda sonora, no en vano su director es un gran músico. Consigue combinarla tan bien que los clásicos se mezclan con la música compuesta por él mismo siempre en clave de rock con guitarra eléctrica de forma magistral a la vez que extraña y atrayente. Consiguió triple disco de platino.


Basado en un relato del mismo director y guionista abarca demasiado y escolla en muchos momentos. La vida de Freccia es demasiado grande, a veces parece inmensa y lo que pasa en poco tiempo podría haber abarcado casi una vida entera pero al contrario de parecer intensa llega a aburrir. El amor por la anécdota pierde el conjunto y despista.



PROS: El Primer discurso de Freccia. El entrañable personaje de Tito. Y la canción final, Ho Perso le Parole, siempre de Ligabue, “come no”.


CONTRAS: Bonanza, el personaje cinéfilo, a veces rozando el histrionismo.


No puedo resistirme a escribir y enlazar el video de tremenda escena:





"Oggi ho avuto una discussione con un mio amico, lui dice che se uno non crede in certe cose non crede in niente. Beh, non è vero, anch’io credo:


Credo nelle rovesciate di Bonimba, e nei riff di Keith Richards. Credo al doppio suono nel campanello del padrone di casa che vuole l'affitto ogni primo del mese. Credo che ognuno di noi si meriterebbe di avere una madre e un padre che siano decenti con lui almeno finchè non si sta in piedi. Credo che un'Inter come quella di Corso, Mazzola e Suarez non ci sarà mai più, ma non è detto che non ce ne saranno altre belle in maniera diversa. Credo che non sia tutto qua; però, prima di credere in qualcos'altro, bisogna fare i conti con quello che c'è qua: e allora mi sa che crederò primo o poi in qualche dio. Credo che se prima o poi avrò una famiglia sarà dura tirare avanti con trecentomila al mese, però credo anche che se non leccherò il culo come fa il mio caporeparto difficilmente cambieranno le cose. Credo che c'è un buco grosso dentro, ma anche che il rock and roll, qualche amichetta, il calcio, qualche soddisfazione sul lavoro, le stronzate con gli amici, bè, ogni tanto questo buco me lo riempiono. Credo che la voglia di scappare da un paese di ventimila abitanti vuol dire che hai voglia di scappare da te stesso, e credo che da te non ci scappi neanche se sei Eddy Merckx... Credo che non è giusto giudicare la vita degli altri, perchè comunque non puoi sapere proprio un cazzo della vita degli altri. Credo che per credere, certi momenti, ti serve molta energia. Ecco, allora vedete di ricaricare le vostre scorte con questo..."




Publicar un comentario

Copyright © El lado oscuro del celuloide. Designed by OddThemes