APRENDIZ DE CABALLERO (VIRGIN TERRITORY)

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¡Qué blasfemia! Elegir a Hayden como galán romántico en una comedieta absurda.. ¿Quién pensó que este tipo podía tener gracia? Irrisoria a la par que surrealista Christiensen se convierte en un noble italiano que en plena peste negra encuentra útiles divertimentos en un convento (con una Anna Galiena como madre superiora) mientras su enamorada tiene que huir de un malo malísimo (¿Quién engañó a Tim Roth?) que pretende desposarla y el legítimo prometido de esta, un conde ruso, termina por completar el reparto surrealista..


Eso sí, el Christiensen ya se ha conseguido acostar con medio The OC en la pantalla (No sabría calificar esto de bueno o malo). Las incoherencias y anacronismos se suceden mientras (¡Cómo no!) el galán se quita mucha ropa. Digamos que esta especie de Porky’s medieval con pretensiones ofende a la comedia sexual de los ochenta tanto como al espectador del 2008.



No sabría por donde empezar para demostrar que nadie debería visionar este bodrio cual copa de pino. Quizás explicando que en la mitad de la película la decisión, a lo mejor acertada de empezar a enseñar tetas y culos hace degenerar aún más, si cabe, la floja trama inconexa. Y luego nos preguntamos por qué algunas películas tardan en estrenarse. ¡No señores! Habría que preguntarse en primer lugar por qué puñetas se rodaron y después porque llegaron a ver la luz.


Yo personalmente despediría a todos los agentes que han elegido para sus representados los papeles, mataría al director y a los guionistas (si es que los tiene) y después esperaría que el mundo sea un lugar mejor.


Para colmo de despropósitos aparece David Walliams en una escena la mar de Phytonesca.


PROS: NS /NC

CONTRAS: Todo en general

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