Sitges 2017, Día 1

Este año la familia crecía, y eso siempre es bonito, no es que este año nos atreviésemos a llevar a los querubines, esa nueva generación de cinéfilos que estamos criando a imagen y semenjanza y que en cuanto sepan leer y capaces de tolerar las masacres nos llevarán de paseo a Sitges ellos mismos para unir generaciones. ¡Qué bonita e idílica imagen! ¡Todo se andará queridos míos!


En fin, que este año las conversarciones eran más ricas, las notas más pobladas y había una persona más en discordia que consiguió enriquecer un poco más la experiencia sumando sabiduría y madurez (Sólo porque le dio por cumplir años en pleno festival porque maduros, maduros , no somos en este grupo ninguno).  Si dejamos de lado las anécdotas extracinematográficas y los momentos "Mejor sólo que mal acompañado" con nuestras visicitudes de transporte la cosa se puede saldar con una expericnecia de 10 en lo personal, ahora, entremos en materia y califiquemos lo visto en la gran pantalla. Con 20 películas, 10 cortos y para rellenar The Room la cosa promete. ¿Vienes a descubrir el primer día?

THE WALL

 Empezar con una película bélica protagonizada sólo por tres personajes y en la que sólo uno se ocupa del 80% de los diálogos y los planos es una opción dura para primera hora de la mañana. Pero como estabamos frescos y lozanos nos dejamos llevar a los preciosos gaseoductos de Irak y el acoso de un francotirador a dos pobres soldados con un pie en casa.

Con el único parapeto de un muro de adobe y tras la primera trifulca balística la cosa queda entre un bueno y un malo y un diálogo vía radio donde se cuentan un poco sus miserias y el uno intenta acabar con el otro y viceversa, a pesar de que evidentemente hay alguien que lleva la "voz cantante" y otro que tiene las de perder.

Nada tiene que ver el ritmo, los efectos y el presupuesto de Doug Liman en esta cinta si lo comparamos con su cinematografía anterior aunque hay muchas cosas que casi prefiero de este experimento extraño e intimo amparado sólo en los diálogos y que escarba un poco en las emociones de unos y otros y las motivaciones de los seres humanos para hacer lo que hacen, incluso en lago tan loco como la guerra.

MUTAFUKAZ


Reconozco que en ocasiones mi acercamiento a la animación es demasiado escaso. Si bien toca pringar con todo el material infantil que llega a alas salas las cintas dedicadas a adultos es raro que lleguen a la gran pantalla y el acceso desde casa es tirando a limitado. Gracias al empaque de nuestro miembro más "anime" siempre hay una buena dosis de cine de animación y hasta la fecha no había defraudado. Este año si que hemos pinchado en alguna, aunque no en Mutafukaz, una película bizarra de animación europea con estética comic postapocalíptica y mutantes extraños en un entrono hostil e incómodo. La historia del raro huérfano Angelino y su amigo "huesudo" crece poco a poco para acabar explosionando en una catarsis de luchadores mejicanos y gansters armados hasta los dientes.


No os voy a engañar, a mi la cosa me dejó un poco fría. Creo que el clima y las ideas eran geniales para haberse desarrollado en una serie y que como película no acababa de convencerme. Me caían bien los personajes pero no entendía las motivaciones y los giros locos eran un poco aleatorios. Supongo que conocer el comic habría ayudado un poco en la ecuación pero como neófita simplemente apruebo la osadía y la recordaré con cariño.

FIREWORKS, SHOULD WE SEE IT FROM THE SIDE OR THE BOTTOM?

Reconozco que tras ver el trailer de Fireworks y leer un poco el argumento esperaba una sosa película de animación que al menos entretuviera un pcoo sin gran pretensión. Pero no. En realidad estabamos muy equivocados. Fireworks tenía un pasado oscuro y turbulento en forma de cortometraje que si hubiéramos conocido quizás hubiera bloqueado la película a la hora de seleccionar el material de este año. Pero ¡Oye! De los errores se aprenden.


El argumento es básico, los japoneses tienen una habilidad para hacernos entender su cultura estudiantil a través el manga de forma que a la quinta película que ves reconoces sus grandes motivaciones basadas en el amor, las fiestas del pueblo y los pueblos con cuestas continuas. Por cierto, lanzo la pregunta, si van siempre en bici... ¿Cómo suben luego por esas empinadas pendientes? , ya me he quedado a gusto. En este caso la protagonista es la guapa de la clase y la fiesta local tiene uno de los castillos de fuegos artificiales marinos más imponentes del lugar. Así que los colegas quedan para verificar si los fuegos artificiales son redondos o planos en función de donde se coloque el que los está viendo. Mientras se agarran a esta recurrente misión la muchacha pide salir a uno de los muchachos y una bola misteriosa que hace volver atrás el tiempo al grito de "Y si..." permite a uno de ellos probar cual día de la marmota, las posibilidades del día. Pero en realidad importa poco, porque en realidad no importa un carajo porque todo lo que pasa parece que lleva a una escena en la que cantan en un tren sin motivo aparente que acaba de hacer saltar los plomos de cualquier mente estable.

DAVE MADE A MAZE


Encontramos el entusiasmo el primer día. Algo que por fin fue un´nime, glorioso, hilarante... ¡Un laberinto! Una locura en forma de creatividad y de ideas geniales, una detrás de otra. Eso sí, siempre que aceptes entrar dentro de la locura desde el inicio cosa que se hace fácil por la simpatía de los protagonistas de la historia. De una parte está Annie, una muchacha muy resuelta que cuando llega a casa encuentra a su novio Dave dentro de una caja de cartón. Pero lo que parece un pequeño castillo en realidad es un laberinto y desde su interior informa sobre la imposibilidad de salir. No hay forma de que pueda encontrar la salida. Annie se lo cuenta a sus colegas y en unas horas todos están en el salón admirando la obra de arte hasta que Anni decide entrar a rescatar a su pobre pareja y efectivamente al traspasar la puerta con un nutrid grupo de gente descubre que no es una invención de su novio, que realmente ha construido un laberinto lleno de misterios y peligros.




Bill Waterson pasó por la sala para  desear risas y fantasía a los presentes. Era un tío majo, de estos que con un minuto de micrófono se ganó la simpatía de todos los presentes así que la película fue como la seda.

Puede que haya lagunas o que a veces sea complicado seguir el ritmo pero sin duda con el derroche de imaginación, de chascarrillos y de humor se puede perdonar todo. Aunque sólo sea por el tiempo que tardaron estos pobres muchachos en la sección de papiroflexia.

Muy recomendable.

LA PIEL FRÍA

La piel fría llegará en breve a los cines. Viene precedida de una novela de éxito que no he tenido el gusto de leer que por las fuentes que manejo (mis compañeros de viaje en concreto)  es bastante fiel al original. El problema es que la cosa no da para mucho. Albert Sánchez Piñol monta una historia de islas abandonadas, de estudiosos, de faros y de misterios que salen del mar con forma de Aura Garrido pero en azul. No sé si me explico pero con al cantidad de spoilers del trailer intento minimizar los daños del mismo.



La película fue presentada por Xavier Gen, director de género fantástico y de acción por lo que la factura no tiene ninguna pega. Reconozco que quería que la película me llegara un poco más. Quizás por Aura, quizás por la novela, quizás porque Frontiere(s) me había hecho gracia... pero no cuaja. Una pena.

SELECCIÓN DE CORTOMETRAJES

Meter una ristra de cortometrajes en vena, sin pretensiones, sin saber qué es qué y con que te van a sorprender o dejar helado. En el resumen voy a ser concisa porque en su mayoría me cuesta mucho entender la esencia de lo que sus responsabes pretendían y en ocasiones incluso he sido incapaz de entender básicamente lo que pretenden contar.

Cerulia, es un corto mejicano sobre traumas infantiles, siniestros personajes burtonianos bastante sádicos y  retorcidos y un ambiente muy inquietante.

I think you’re a little confused es... la historia de uan chistorra que desvarái hasta el infinito y queda en una tomadura de pelo total.

L’ogre no mejoró la impresión de la proyección, no tengo ni la más remota idea de lo que quería trasmitir a parte de un poco de asquete y tedio.

Nocturne es una partida de dados infernal.

Fatcula me devolvió la esperanza. Un argumento divertido y fluido, además eso de hacer un guiño a Drácula en un año como este que se homenajeaba la figura del chupasangre, aunque en este caso le da por chupar grasa. Que, oye, visto así le ofrezco un banquete ahora mismo.

(Fool time) job, el corto , a pesar de las diferencias de apreciaciones y las lecturas de lo más variopinto sobre animalismo, trabajo basura, desigualdad social, xenofobia... en fin. Al menos mantiene un cierto nivel de angustia e interés. No resulta ofensivo e incluso me gustó. Las cosas como son.

Play boys, misterios de la naturaleza. Este corto inconexo pero unido crea más confusión a mi mente al borde del límite de ingesta cinéfila del día.

La casa de los colores, no acabo de entender qué tiene de fantástico este cuento ñoño con moralina y facilón. No convence e incluso ofende.

Valley of white birds, el corto tiene una estética preciosa. Pero de verdad bonita. Es muy agradable de ver aunque la verdad es que las metáforas me pierden un poco. A  lo mejor mi mente no está capacitada para prodecsar los cortos y necesito que me lo cuenten todo un poco más mascado porque la inmensa mayorái de los cortos me daban una ligera ansiedad al intentar procesarlos.

La nuit je danse avec la mort, la realización y el estilo pintoresco de este viaje al mundo de las drogas es ideal para adornar un videoclip de Coldplay. Muy mono y con final feliz aunque no tengamos claro si el viaje termina bien del todo o no. Lo que si acabó fue la sesión de películas del día.



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