Años más tarde Verdone retoma un titulo que nos es familiar. Ahora el italiano contemporáneo tiene otros problemas más mundanos que votar. Por eso Carlo decide meterse de nuevo en la piel de tres italianos raros a más no poder en otros tres episodios donde da vida a Leo, un pobre hombre que tras la muerte de su madre emprende un viaje titánico de dimensiones desproporcionadas para enterrarla en su pueblo. Tras una serie de catastróficos acontecimientos las cosas van siendo cada vez más dantescas y divertidas para su familia. Para no perderse a los dos niños cuya voz es un resorte automático para reír a carcajada limpia.Tras el cándido personaje inicial, Leo, el mismo que protagonizó al Trasteverino Un Sacco Bello o el Mimmo de Bianco, rosso e verdone (en este caso la película no entremezcla las historias si no que las cuenta separadas al no tener puntos en común) Verdone se pone en la piel de Callisto, un profesor universitario metódico y despótico aficionado a los placeres carnales, preferiblemente previo pago, que tiene a su hijo totalmente idiotizado en casa bajo su enorme presión. Entonces entres su alumnas encuentra una posible pareja para conseguir que su hijo espabilen aunque el resultado no es el que esperaba.
Y por último la familia hortera, esa que chilla en los restaurantes. Los nuevos ricos se van de vacaciones. Mientras el padre se dedica a intentar conquistar a una joven elegante y sofisticada la madre ve cumplido uno de sus deseos de juventud y el hijo, un destroyer en potencia, encontrará también un entretenimiento mientras el resto de los huéspedes del hotel sufren sus comportamientos grotescos.
Menos brillante que Bianco, Rosso e Verdone esta nueva cinta rodada en 2008 es una forma de retomar los populares personajes por los que se dio el actor a conocer en la pequeña pantalla actualizando los modelos típicos del italiano medio y provocando un buen número de carcajadas honestas, cosa que a estas alturas es difícil decir.
PROS: La brillantez del director y del actor principal
CONTRAS: Quizás este tipo de cine huele ya un poco a rancio a estas alturas.
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