El soft porn de Netflix (Parte 1)

Netflix ha encontrado un filón en un género poco explotado y conocido como es el Soft porn. Consiste, nada más y nada menos, que en series o películas cuyo contenido romántico se deja manchar por escenas de sexo donde a veces insinúan más que enseñan. Un pecho por aquí, un culo por allí e incluso he visto un pene. ¡¡UN PENE!! Esto ha abierto una ventana en los adolescentes que llega hasta las señoras de 45 que se conectan para disfrutar de estas series con un poco de pudor pero mucho placer culpable. ¿Quieres conocer cuales son las series más soft porn de Netflix? Pues apunta, apunta.

Los Bridgerton 

Se ha convertido en el buque insignia de las apuestas del canal de streaming para las jovencitas (y no tanto)se trata de un Sentido y sensibilidad disfrazado de culebrón Victoriano que hace más confesable reconocer que te la hayas visto en un fin de semana del tirón o que la hayas repetido. Este fenómeno afecta a niñas enamoradas de la visión romántica a de su protagonista (casi más por el masculino que por los femeninos) y señoras que han descubierto este nuevo género y lo están disfrutando a tope. 

Basados en novelas al más puro estilo chick lit pero con toques históricos parece inofensiva pero ya os aviso que muchas han tenido sofoquitos en alguna escena de “culeo” que es como llamo yo a toda aquella escena de sexo donde incluyen cultos masculinos y descamisamientos para hacer felices a sus consumidoras. Esto ya lo hicieron con Colin Firth y causaron sensación pero es una fórmula que no debe caducar. Es más, eso hace que las señoras de 45 años, consumidoras de ese chapuzón en el lago, la consideren un poco más “suya”. Calidad, calidad,… pues hijos, da lo que se espera y viendo la gente que la  ha “devorado” convirtiéndola en el éxito de 2021 no voy a ser yo quien diga que es mal (un poco sí lo es pero es muy disfrutable) 

Así que en nuestro SOFTPORNOMETRO gana un 9/10.

Élite 

No vamos a ser cínicos. Todo el mundo odia esta serie pero todo el mundo ha visto todas las temporadas, incluyendo los cortos y extras, desde el momento en que se estrena está en el número 1 de lo más visto del país. Y ahí se queda SEMANAS. Así que es un poco como votar al PP. Nadie reconoce que la ve pero todo el mundo lo hace.


En esta ocasión es verdad que el rango de edad por abajo llega a los 15 años y por arriba desciende a los treinta y tantos. 

Pero la cuestión es que Las Encinas se ha convertido ya en un referente para los adolescentes del país pese a su gran catálogo de vicios en forma de drogas, alcohol, sexo y asesinatos. Porque ya es mala suerte que casque alguien en cada curso escolar. Vender la vida de los ricos y pobres de esta manera es muy tipical spanish y en cierta forma un poco obsceno para los que aman el mundo real. ¿Es soft porn? Pues incluye tetas y culeo así que si, en este caso tiene un punto Sobras de Grey porque muchas de las cosas las cuentan de viva voz de forma que no es tan “obvio” pero ahí queda ese contenido sexual. Nota de SOFTPORNOMETRO: 8/10

Valeria

Si antes mencionamos sutilmente el Chick lit este es un producto directamente sacado de esos libros, con el plus de ser Made in Spain. Los libros de Elisabet Benavent son top ventas y la serie no podía ser menos. Mucho más minoritaria que las anteriores esta la consumen las lectoras de los libros que no dudan en denunciar que es mucho peor que los libros. Pero ahí están dando al play como cosacas. La producción es muy económica por lo que Netflix seguirá desarrollando el universo de Valeria. Su éxito se apoya directamente en un sólo hecho: Maxi Iglesias. Punto. 

La historia principal de Valeria se acompaña en las de sus dos amigas (una muy sexual un poco homenaje a Sexo en Nueva York) y otra más romántica. Peor en realidad lo único que interesa es ver la media sonrisa de Máxima, su torso descubierto y sus sesiones de “culeo”. Suma puntos el toque romántico que comparte con Los Bridgerton pero los actores, los guiones y la historias son bastante malos. Lo que pasa es que no importa un bledo. ¿No has visto a Maxi?. 


En fin, es un 9/10 en el SOFPORNOMETRO. 

Sexo/Vida

La he dejado para el final aunque realmente es una de mis favoritas. Supongo que además es la que más personas desconocerán porque… porque no es para todos los públicos. En esta ocasión os voy a dar un poco más de contexto. Una madre (de dos) , ama de casa y amante esposa empieza a rememorar sus tiempos mozos donde estaba saliendo con un PEDAZO DE MACIZO. Todo esto lo deja reflejado en su diario recordando sus polvos épicos con nostalgia. Su marido lo descubre y la cosa se tuerce un poco. Empiezan a desarrollar una relación poco sana en la que el marido intenta emular las proezas épicas del ex y el ex reaparece como tentación en su vida. La serie es mala, pero mala. Pero no puedes dejar de mirarla. En el caso de las chicas enseña casi todo pero en el caso de los chicos tenemos dosis de descamisado y “culeo” a gusto del consumidor. Pero hay más.

Reconozco  que llegué a esta serie exclusivamente por los comentarios de asombro de Twitter. Episodio 3 minuto 19.50. Nada más que añadir señoría. Y es que el full frontal de Adam Demos es lo que casi medio mundo haya dado al play. Las críticas en las redes son nefastas. Las feministas se echan las manos a la cabeza por los argumentos de la protagonista, los hombres se siente amenazados por la concepción del sexo, las mujeres en general odian a su personaje principal Billie (no las culpo, es totalmente odiable) pero aún así van a hacer una segunda temporada porque ese si que es el Soft Porn que nos merecemos. NOS LO MERECEMOS. Si quieres saber lo que esconde esa escena que ha catapultado a la fama a su protagonista y ha llevado al éxito a la serie no te cortes. Esto es una frutería, hay que ver el género antes de comprarlo. 

De momento esta serie se lleva un 10/10 en el SOFTPORNOMETRO por miembros propios, perdón, por méritos propios… ¿En qué estaría yo pensando? 


Por supuesto algo me dice que este género que tantas alegrías nos está dando seguirá aumentando así que me sacrificaré viendo “culeos” para poneros al día en la segunda entrega. ¡De nada!

Publicar un comentario

Copyright © El lado oscuro del celuloide. Designed by OddThemes