BANGKOK DANGEROUS

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Estaba yo bastante preocupada porque me saqué una foto con la figura de cera de Nicolas Cage en el museo Madame Tussauds y la figura me parecía muy falsa con un peluquín espantoso. Pero ahora, tras ver la última fantasmada de acción del antaño decente actor descendiente oculto de la rama de los Coppola. En realidad la fina patina semejante al plástico que le recubre junto con el horrendo bisoñé hacen que casi la foto del museo de cera me resulte más atractiva.

En esta ocasión el señor Cage es un matón a sueldo con unas férreas normas con respecto a sus asesinatos. Es anónimo, desaparece sin dejar rastro, s invisible y, por supuesto, no permanece mucho tiempo en el mismo lugar. Tras acabar su serie de asesinatos en Praga viaja a Bangkok para realizar sus siguientes cuatro trabajos repitiendo su ritual. Contacta con un delincuente para que haga de chico de los recados para poder librarse de él después y comienza a recibir los nombres de sus victimas. Pero por cuestiones extracurriculares (dícese una tailandesa sordomuda) empieza a involucrarse con personas fuera del trabajo llegando a coger cariño incluso a su novato ayudante. Y eso para un tipo duro no es nada bueno.

La película que es un remake de los mismos hermanos Pang de otra cinta realizada en el 99 en realidad es algo más complejo, es como si hubiesen decidido meter los ingredientes en una batidora y mezclar los personajes para intenta,r con poco éxito, dar un poco de profundidad dramática. El resultado es una lacónica sucesión de escenas imposibles acción aderezadas con un poco de pintoresco turismo local. Ninguno de los protagonistas consigue salvar un guión bastante cogido por los pelos con alguna dosis de sangre que rallan la serie B y provocan un anacronismo que bien puede provocar alguna carcajada. Además lejos de la original decide transcurrir por los senderos del cine políticamente correcto a favor de que los protagonistas gocen de una poco traumática evolución empeñados como siempre en buscar un final más idóneo que la predecesora a pesar de alguna carnicería con visceras y manos amputadas .

Por lo demás los Pang han decido pensar que poder poner a sus asesinos motos de diseño y metralletas molonas podía hacer que la película cambiase algo dejando de lado algunos retazos visuales que en las persecuciones con angulares imposiles y aceleradas de la versión del siglo pasado tenían bastante innovación y resultaban llamativas conformándose con un bodrio protagonizado por mi querido y decepcionante Cage.


PROS: Que la melena al viento del señor Cage distrae tanto que se te pasan por lato los demás fallos garrafales.

CONTRAS: haber visto la versión tailandesa que es incuestionablemente un mejor ejemplo de cine de acción sin edulcorar.

1 comentario :

  1. Si es que desde que se enrrolló con la Penélope Cruz (durante el rodaje de "La mandolina del Capitán Corelli", y se divorció de su preciosa mujer, Patricia Arquette, va de mal en peor.. (debería también pedirle consejo al que le pone los peluquines a Sean Connery...).

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