Llevo escribiendo sobre cine toda mi vida. En este blog en concreto desde 2006. Eso son muchos años teniendo en cuenta que solo el 10% de los blogs supera los dos años de vida. Creo que es muy importante saber adaptarse a las necesidades del que escribe y de los que lo leen. Al principio escribía críticas de estrenos. Muchas. A razón de 3 o 4 a la semana. Tampoco había muchos blogs de cine y casi ninguno tenía formato Magazine así que se diferenciaban los blogs de las revistas y las webs de forma bastante sencilla. Poco a poco esto cambió y los blogs se profesionalizaron tanto que había espacios de cine mucho más interesantes que los de las revistas tradicionales. El contenido era más rápido y dinámico pero también estaba al alcance de cualquiera en las dos direcciones, en la creación y en el consumo.
En ese momento yo tomé la decisión de abordar las críticas desde un punto de vista más divertido, menos académico. De reírme más y disfrutarlo. Fue una gran época. Como todos en esta vida hubo años que el blog estuvo abandonado. Un bebé hace difícil encontrar tiempo para producir contenido, más aún cuando el contenido requiere dedicar dos horas de visionado más documentación y escritura. A la vuelta de la baja de maternidad al blog me di cuenta de que el ritmo infernal y la cantidad de personas haciendo “lo mismo” hacían que mi espacio hubiera perdido la frescura. No daba nada que no estuviera ya en mil sitios mejor o peor escrito.
Allá por 2016 decidí tras volver del festival de Sitges que tenía que escribir solo de lo que me interesaba. Dar voz a un cine que, quizás, no estaba tan presente, sobre todo porque el 80% de los contenidos cinematográficos los escriben hombres. Ahí encontré la nueva estructura del blog: un blog feminista con contenido especialmente dedicado a la maternidad y una sección de cine infantil.
Esa era mi especialidad, era lo que consumía y lo que me llamaba la atención. Pero también me daba cuenta de que las películas no se abordaban nunca desde el punto de vista extra cinematográfico pero que estaban creadas para llegar a un público concreto ¿es interesante saber la opinión de Boyero sobre una madre con privación de sueño? No. Lo interesante es saber si la película conecta con esas madres que llevan una semana sin dormir. Y esa era yo.
Así de todo lo que consumía solo una parte muy selecta llegaba al blog. Escrito con humor, con torsos de hombres desnudos y sin olvidar hablar de festivales y cine de género de vez en cuando. Así resurgió el blog que llegó a ser finalista en los premios 20 Blogs en 2017, 2018 y finalmente ganando esta edición de 2019.
Esto demuestra que los blogs son parte de nosotros mismos. Este blog es una parte muy importante de mi vida Me ha permitido conocer a gente maravillosa y unirme a proyectos muy locos. Como en la gala no dejaron soltar un speech decente voy a aprovechar para hacerlo por aquí.
Doy las gracias a los que me llevaron al cine desde siempre. Primero mis padres que se tragaron todas las películas de Disney pero también me llevaron a ver las de Bond o Jean Claude Van Damme.
A mi hermana que cuando le dices que se venga al cine no pregunta ni la película que vamos a ver ( y a veces se arrepiente de hacerlo).
A mi hijo por hacerme ver las cosas con ojos nuevos.
A mis amigos de “MUCHOCINE”. Fue una etapa fascinante donde la gente hacía “kedadas” y conocer a gente por internet aún daba mucho chungo. De esa época conservó grandes amistades. Gente que te llega a la patata. Si hace una década me dicen que iba a seguir hablando con ellos o yéndonos a Sitges a lo loco les hubiera dicho que están tarados pero ya somos unos carrozas y eso no lo separa nadie. Tan locos están que hasta un podcast de cine se han montado y disfrutamos mucho diciendo tontadas que no escucha nadie.
A los que estuvieron al principio de la aventura. Sobre todo a Karlos Kartoons que de forma altruista y preciosa me cedió una cabecera y me regaló el diseño para mantener la identidad durante todos estos años sin pedir nada a cambio. Cuando consiga cobrar algo por este curro prometo que reparto contigo amigo.
A los nuevos cinéfagos tróspidos, la iniciativa pandemia cinéfila que me ha salvado del mono de ir al cine desde que comenzó este desastre de año del infierno que es 2020.
A los que aguantan la chapa y leen esto especialmente a Juanjo y Rocio (aunque me riña por no hacerla caso nunca).
A Premios 20 Blogs por llevar 3 años confiando en el blog y premiarlo sobre otros proyectos súper interesantes que han sido duros de pelar estos tres años. Y a los que sin llegar a ganar o siquiera a presentarse siguen escribiendo un blog por amor al arte porque disfrutan haciéndolo.
Y a todos los que van al cine, porque si dejamos de ir al cine la cultura se muere un poco.
¡MUCHAS GRACIAS A TODOS!!
Si quieres ver nuestra parte de la gala... dale al PLAY
Te voy a seguir riñendo, sobre todo si me laleas.:P Y por supuesto, aún más riña, por no hacerme caso y ver una peli que te recomiendo tan sólo un par de años más tarde (o más) , jajajaja. Yo riño siempre, es mi carácter.... y te gusta :P
ResponderEliminarSoy de Madriz y no te hago ni caso. Como Ayuso al mundo.
Eliminar